La Poesía de Rafael

La Poesía de Rafael

Rafael Bordao vuela sobre las aguas del Caribe. A veces pensando con un léxico rico, y preocupado por el sufrimiento humano o por las ambiciones de libertad cubana, vuela noblemente, grandiosamente, un cóndor; en otros poemas la nostalgia rinde un tono más delicado y Rafael es un pajarito que chirría sentimentalmente al recordar su patria (Cuba).

Pero casi siempre sobre el mar, esas aguas que oximorónicamente separan a los cubanos de los Estados Unidos de la isla, mientras los une con ella en un movimiento continuo de olas y travesías. Y siempre con intensidad poética.

En estos poemas, aquí lindamente «valientemente» traducidos al inglés, hay momentos de enojo, de frustración, de frenesí. Dirá el lector que también se encuentran oasis de tranquilidad; pero si penetramos bien observamos que por debajo fluye siempre una intensidad poética y una ansiedad personal.

No, la mente y el alma del exiliado no gozan de serenidad sino en algunos instantes de observar la belleza, sea el mar calmado de la naturaleza, sea un patio cubano de tranquilidad humana. Rafael canta con notas libres y originales, lanzando su panegírico del valor del individuo, del amor a la patria y sobre todo del derecho decisivo de la libertad. Rafael ha encontrado la suya no sólo por vivir en los Estados Unidos, sino por no dejarse desalentar por las intrigas de grupos ni por las tentaciones de la sociedad materialista.

Llegó a estas orillas pobre y confuso (en la ola del Mariel), pero desde el principio, no obstante la fatiga de la lucha por sobrevivir personalmente, jamás ha dejado de crear y editar poesía. Es la poesía que constituye su máxima expresión, su verdadera libertad.

Con eso pensado debemos abordar la lectura y el goce de sus poemas, con su emoción elevada, con sus cadencias de ritmo natural, con sus imágenes atrevidas y su léxico opulento.

Gracias, Rafael, por tu talento y por abrirnos tu corazón.Dr. Mordecai Rubin (Tercher’s College, Columbia University). Estas palabras fueron el prólogo del libro Los despojos del sueño (edición bilingüe, 2000).